Tipos de piel

Determine el tipo de piel y lea consejos útiles para cuidar diferentes tipos de piel.







¿Cuál es el tipo de piel?

El tipo de piel de cada persona es estrictamente individual y representa una combinación de tres factores:

  • El contenido de agua, que es responsable de la apariencia saludable y la condición de la piel cómoda;

  • El contenido de lípidos, que regulan la suavidad y la nutrición de la piel;

  • El nivel de sensibilidad de la piel, que está determinado por la resistencia y la vulnerabilidad de la piel.





Dependiendo de la combinación de estos tres factores, distinguimos los siguientes tipos de piel:



Piel muy seca

La piel más seca puede ser áspera y escamosa.

En la capa externa, a menudo se forman muchas heridas, con mayor frecuencia en las manos, las axilas y las piernas.



Condiciones para la piel muy seca: envejecimiento genético u hormonal, así como condiciones climáticas agudas: fuerte viento o rayos ultravioleta.

Señales indicativas: poros casi invisibles, color mate con manchas rojizas.



Piel seca

Esta piel es en su mayoría normal, pero periódicamente hay sequedad y vulnerabilidad.

Cuando ella está expuesta a un clima adversocondiciones (luz solar intensa, temperaturas muy bajas o altas, tratamiento con medicamentos inadecuados), se vuelve seco e irritable. Debido a la influencia del medio ambiente, la sequedad y la descamación generalmente aparecen en la piel. En algunas personas, la piel seca puede ser hereditaria. No pica, pero a menudo en la piel hay peeling, incluso pequeñas heridas, lo que lleva a la incomodidad.



Condiciones para la piel seca: envejecimiento genético u hormonal, factores externos: viento y rayos ultravioleta.

Señales indicativas: poros casi invisibles, piel mate con manchas rojizas.



Piel normal

La piel normal contiene una cantidad óptimamente equilibrada de agua y lípidos. Se caracteriza por una sensibilidad moderada.



Condiciones para la piel normal: un equilibrio ideal entre la tasa de crecimiento y el intercambio de células de la piel.

Señales indicativas: poros casi invisibles y color de piel rosado uniforme.



Piel combinada

Si tu piel está más grasa en la frente y la barbilla, que en las mejillas y alrededor de los ojos, tienes una combinación de piel.

El grado de gordura o sequedad puede variar según la temporada (la piel suele estar más seca, cuando hace frío). Incluso la piel grasa puede engrosarse e inflamarse en invierno.



Condiciones para la piel combinada: un desequilibrio en la formación y distribución de lípidos, que depende de las características hormonales o genéticas.

Señales indicativas: poros dilatados, a menudo grasientos o con manchas negras, especialmente en la zona T. La piel es muy seca o demasiado grasa, con irritaciones frecuentes en las mejillas.



Piel grasa

La grasa de la piel puede variar en diferentes días, endependiendo del sol, viento, estación y tiempo en general. Las células grasas forman demasiados lípidos. La piel es brillante, densa y, a menudo tiene un tono ceroso. Tocar la piel grasa puede dejar una huella grasienta en los dedos. A menudo, la piel grasa crónica tiene poros abiertos, acné y otras imperfecciones. Está predispuesto a la aparición de puntos negros. En este tipo de piel, las glándulas que producen secreciones grasas son hiperactivas y forman lípidos en exceso. Los lípidos le dan un brillo graso a la piel. Los poros están muy agrandados y la piel tiene una apariencia poco saludable.



Condiciones para la piel grasa: hiperactividad de las glándulas que producen grasasecretos, durante el inicio de la pubertad u otros desequilibrios hormonales, el estrés, los antibióticos. Demasiado altas temperaturas y humedad contribuyen a la apariencia de la piel aceitosa.

Señales indicativas: poros dilatados, color mate, piel brillante, puntos negros y granos.





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